Hoy en día, vivimos en un mundo en donde las personas: los jóvenes, adultos y también los niños están totalmente inmersos en la tecnología o la tecnología nos tiene consumidos a nosotros como por el ejemplo en los niños el Internet.
La falta de actividad física provoca un debilitamiento de los huesos, es decir, hace que los huesos pierdan estabilidad y fuerza, abriendo paso a enfermedades tales como osteoporosis, diabetes tipo 2 y la hipertensión.
Sabemos que las grasas, calorías y energía que comemos deben ser también quemadas, así ante cualquier movimiento que requiera esfuerzo físico como subir escaleras, caminar, levantar objetos, o correr no produzca la fatiga que es la primera señal de sedentarismo.
Al no tener actividad física las grasas que consumimos se almacenan en varias partes de nuestro cuerpo, provocando que aumentemos de peso, estimulando así al desarrollo de la obesidad, algunas de ellas con consecuencias irreversibles incluso pueden provocar la muerte.
Es por eso que se recomienda a las personas desde temprana edad inculcarles la actividad física para que estos lo tomen como actividad diaria y común .Con la finalidad de que viven con buena salud y en armonía y no preocuparse de las enfermedades que originan el sedentarismo, enfermedades cardiovasculares, respiratorias, obesidad.
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